Cuantos sueños nos vamos dejando a lo largo de nuestros caminos por la vida y cuantas ilusiones.
Soñamos tantas veces con ese amor que nunca llego a nuestras vidas, que lo idealizamos a través de nuestros sueños, tan fuerte lo hacemos que un día sin saberlo nos damos cuenta que ese amor lo tenemos ahí al alcance de nuestras manos, casi lo tocamos, tan solo necesitamos un esfuerzo y lo conseguimos.
Luchamos por el, seriamos capaces de recorrer el mundo o atravesar un océano, para poder demostrarles nuestro amor, llevamos nuestra sonrisa y una maleta llena de ilusiones, y porque no una rosa blanca en nuestras manos.
Pero sin saber porque, esa magia se nos escapa y nos encontramos con nuestra rosa blanca mustia por la tristeza de no poder verle a el.
Nos damos media vuelta, nos preguntamos, que hice mal, que fue lo que paso, en algo falle como mujer.
El cielo se vino abajo, no hay consuelo para un corazón enamorado, que sin saber porque un día perdió al hombre que más amo.
Las noches se volvieron frías, sin sus besos y sus caricias, la luna nunca más volvió a brillar, como lo hacía aquellas noches que todo era felicidad. Sus besos eran eslabones nadie los podía cortar. Ahora tan solo quedan recuerdos de aquellos días, recuerdos de oír su voz, esa voz que llena de dulzura declaraba su amor, diciéndonos cuanto nos quería. Y ahora se fue todo. Donde quedo esa esperanza de los corazones, donde se fue el amor?
Gracias Mayte
