Imagen sacada de la red
Te
conocía ya, pero hoy ha sido
cuando te he descubierto
toda mía;
cuando la magia de mi
fantasía
te ha desnudado al fin, te
ha poseído.
Ayer fue el beso de pudor
vestido,
en el que oculto el arrebato
hervía,
y nadie, ni tú misma, lo
veía,
enmascarado en risa el
alarido.
Hoy, aunque desde lejos, has
abierto
brazos y muslos, y la
entrada al huerto
de tus sentidos se ha hecho
manifiesta.
Hoy resido en tu mente, y en
tu entraña;
mañana, en el refugio en la
montaña,
el mundo, entre los dos,
será una fiesta.
Francisco Álvarez Hidalgo