Sólo conozco de ti la sonrisa gioconda
con labios separados el misterio,
mi terca obsesión de desvelarlo
y avanzar porfiado
y sorprendido tanteando tu pasado.
con labios separados el misterio,
mi terca obsesión de desvelarlo
y avanzar porfiado
y sorprendido tanteando tu pasado.
Sólo conozco la dulce leche de tus dientes,
la leche plácida
y burlona que me separa
y para siempre del paraíso imaginado
del imposible mañana de paz;
y dicha silenciosa de abrigo
y pan compartido de algún objeto
cotidiano que yo pudiera llamar nuestro.
Juan Carlos Onetti
No hay comentarios:
Publicar un comentario